Marcas. Navidad. Regalos.

“Rendidos a las marcas y sus condiciones»

La Navidad en el siglo XXI es sinónimo de consumo. El espíritu lo alimentamos con galas y regalos además del buen acopio de cosas ricas que nos metemos en el cuerpo como si de la «última cena» se tratara. Es un sabroso y perfecto momento para las marcas de consumo. Ropa, juguetes, joyas, libros…. tienen, en pocos días, la oportunidad de hacer su propio agosto. Y lo ponen todo tan bonito que, a la oportunidad de regalar aquello que necesitamos, sumamos una, dos, o mejor tres cosas más que no necesitamos.

Nos rendimos a las marcas. Y, en esa batalla, éstas, a sabiendas de que sí o sí estaremos ahí, establecen sus condiciones.

Hace unos días comprobé que Decathlon se suma a otras grandes marcas en la iniciativa de no ofrecer papel de regalo para sus clientes. Ahora lo venden.

Bien. El proceso ha pasado de, primero empaquetar regalos el personal de la marca, a habilitar una mesa con rollos de papel donde los consumidores, a empujones, nos batíamos por las tijeras o por un simple hueco en la mesa a tener que comprar dicho papel y «wrap yourself» en tu casita, majo…

En fin. Como digo, otras marcas de gran consumo como los hipermercados han optado por vender las bolsas de plástico u otras reutilizables, según enuncian, para preservar el medio ambiente y, deduzco que el mismo razonamiento darán marcas como Decathlon, respecto al papel regalo.

Ya. No sé, pero no me lo creo del todo. Me planteo 2 cosas.

SOMOS ECOLÓGICOS
Si tan ecológicos somos, y lo que quieren las marcas es practicar con el ejemplo haciendo un uso sostenible del papel y del plástico, ¿por qué no plantean propuestas alternativas que no sean VENDER al consumidor sus bolsas o papeles de regalo? No sé, se me ocurre, por ejemplo, ofrecer durante periodos extraordinarios como la Navidad, un papel reciclado especialmente fabricado para el momento en un espacio donde se informe cuánto se ahorra, ecológicamente hablando; o bien, propuestas de presentación de regalo que supongan menos cantidad de papel…Para las bolsas, premiar a los clientes que traigan las suyas propias y enunciarlo en paralelo con el beneficio ecológico.

¿NO SERÁ QUE LAS MARCAS AHORRAN/GANAN MÁS?
Seguro que en estas grandes cadenas hay muchos señores con gafas que están todo el día haciendo números para poder cuadrar los porcentajes de ganancias establecidos cada año y se han dado cuenta que eliminando el papel/las bolsas, cobrando por ellos, las cuentas salen mejor. No es que quiera acusarles de deshonestos pero ¿no huele un poquito a eso?

¿Y EL PEQUEÑO COMERCIO?
Frente a estos monstruos del consumo en el que todos, sí o sí, entramos. Es demasiado atractivo, práctico y ajustado de precio como para evitarlo, están tantos y tantos comercios pequeños y no tan pequeños que para poder cerrar una venta, tienen que ayudar al consumidor, hacerle sentir bien, argumentar las ventajas de cada producto, sacar media tienda…y, por supuesto, hacer un precioso y maravilloso paquete de regalo que, además, lo más probable es que vaya dentro de una bolsa.

Cierto. La vida es injusta.

Photographed by ©CabodeMarcas 2015

Cabo-de-Marcas-branding-2015-3-

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *